¿Quién más que yo conoce a mi bien amada?
por esa razón me atrevo a hacerle un retrato
mi amada es vida que viene como cascada
de agua tan cristalina
que hace cantar a los pájaros.
Nace en la montaña igual que lava
escorias hay en su piel y en sus zapatos
pero ella se los sacude su cuerpo lava
llegando al valle limpia y con tacos altos.
Su amor es de esos antiguos que antes se daban
su entrega es casi una olla llena de abrazos
sus besos son de comerlos cual ensaladas
con un biffe de chorizo después de un tango.
Yo que quería en mi vida encontrar un hada
de pronto me vi con ella en mi regazo
olvidarla ya no podría pues me hace falta
pintarle su boca dulce de un pincelazo.