Esteban Mario Couceyro

Esa puerta en la escuela

Estoy sentado, junto a mi padre

con apenas seis años

vestido con saco y pantalón oscuros

y una pesada valija de cuero.

 

Enfrentamos unas enormes puertas dobles

él me decía que confiara en lo aprendido

que me tratarían como a un señor

y como tal debía portarme.

 

No podía mas que respirar profundo

creyendo a pies juntillas los dichos de mi padre

era mi primer día en la escuela

dónde examinarían mis saberes.

 

La puerta se abrió y sentí el llamado

mi nombre

fué la primer vez que fuí consiente 

de llamarme así.

 

Me incorporé, con pausa

como si todos estuviesen atentos de mi

tomé la valija con algún esfuerzo escondido

y caminé hacia la puerta.

 

Al entrar, me presenté 

me preguntaron el abecedario

escribí algunas letras y números

solo eso recuerdo.