No sabes cuanto el tiempo me ha matado;
en la fría habitación que me acompaña,
tan solo sigo pensando si merezco este infierno
talvés no debí intentar amarte un poco más.
Pero que elección tenía;
si mi corazón solo pedía tu compañia,
que debía hacer matar mis sentimientos;
caminar sin mirar atrás.
Sigo preguntándome en este silencio
que diferencía hubiese tenido
dejarte a tras a ti o a mi vida;
es que tan solo no he podido olvidar.
Y tan solo juegas un poco más;
pero date cuenta me matas a cada segundo,
a cada minuto que te acercas;
a mis labios y te vas, con esa sonrisa sínica.
Ya de ja partir mi corqazón;
ya es tiempo que mis lágrimas se alejen;
se conviertan en aquella sonrisa que se fue,
y talvez vuelva algún día.
Quisiera que me pidas que me quede;
pero que cambiaria, ya no seria vida;
prefiero vivir sin tu amor,
a que vivir la vida sin vivir.
Pido que el viento me traiga un susurro,
un te quiero quizás, para olvidar;
aquella huella marcada en mi corazón,
la cicatriz que algún día fue mi luz.
Perdona mi sinceridad pero un adiós es lo mejor;
un hola a la verdad es un tesoro que cuidaré,
que mis sentimientos no vuelvan a encontrar;
aquel amor que me regalaste.
Que la mirada que te ragalé;
aquella vez se pierda en el viento,
y se pose en un amor de verdad,
me voy con el corazón amándote; por el bien de los dos.