Carlos Alberto Domènech Delgado

AQUEL VERANO

Es el viento

El que me arropa al amanecer

Difuminando el recuerdo

De tu presencia en mi ser

Al final de aquel verano

 

Dulces días de quimera

De unos besos por tu piel

De unas caricias eternas

Y un cuerpo sabor a miel

 

Fue tan sólo una tormenta

Diluida por el viento

Una más de aquél verano

Borrando todo el recuerdo

De las páginas de un cuento.