Si bien es cierto que te vas,
no es cierto que me dejas.
Pues partes con lo mas simple
de ti, que era tu cuerpo,
pero mantengo en posesión
todo lo intangible tuyo.
Quitas la mano pero no su caricia.
Quitas los labios, no así, su beso.
Ni tampoco el basto mar de amor
que lleno en tu corazón mi pecho.
Sí. Bien es cierto que te vas.
Pero tanto como llevas
es lo que me dejas,
porque en tu viaje cargas
con los mismos recuerdos
que yo guardo,
y en tu vida como en la mia,
queda una vacante.