He llegado al pie del podio
con mi pequeña estructura
siendo solo una puntada
de tan grandiosa arquitectura.
De versos enamorados
bajo el amparo de la luna
o bien entristecidos
cantados sin voz ninguna.
En un concierto de estrofas
delirios de plumas activas
con poetisas consagradas
que van relatando sus vidas.
Así desgranan emociones
solitarias bajo neblinas
de un corazón herido
o alegrías concebidas.
Me imagino solitario
entre frases divinas
admirando tanta savia
de poetisas queridas.