Si carámbano, serás derretida
por el ardiente fuego que me abrasa;
si rescoldo fueres,tú serás brasa
en la llama de mis ojos hundida.
Y si fueres mujer por tal habida,
ahoga la congoja que me pasa;
mas, si fueras de quereres escasa,
mis ansias te pondrán estremecida.
Con afecto amorosa tu venida
espero, flor de Venus, cuán hermosa,
de pétalos de mil flores ceñida.
¡Oh espejo, luz de vida tan vistosa,
de mirar claro y sereno teñida,
de boca rica: cuán ardiente rosa!
(salvador)