Pobre de mí. De mi cuerpo.
Del jarabe de tu boca,
Del cielo que se escapa
en tu aliento.
Pobre de mí,
de mi risa sin tu reflejo
de mis dedos
dibujando mis piernas
como si fuera
la punta
de tu miembro.
De tu miembro,
temblor de luna
sobre mi garganta.
Colapso de caricias
agitando el silencio.
Colapso, temblor
temblor que golpea
mi vientre,
temblor que se diluye
sobre mi vientre,
temblor que viene
de tu vientre.
Colapso de luna
en mis dedos manchados
de tu simiente.
Pobre de mí, tan pobre
triángulo de Bermudas
que me llama y es
el sitio de dos náufragos
que quieren perderse.