El soplido del viento dura un parpadeo,
Pausado y agradable,
Las calles despiertan
Acompañadas de esa melodía,
Cantada en silencio,
El bello canto del pájaro se ha olvidado,
Solo escucho esa campanada
Que solía acompañarme en eternos insomnios,
Los momentos más bellos en mi vida
Esas madrugadas eternas,
Cada una de ellas dedicadas a mi pequeña Abi
Esta mañana era como aquellas,
En que su presencia no era necesaria,
Solo saber que la podría ver ese día.
Esta mañana tranquila
Llena de neblina por cada calle,
Es un momento lleno de nostalgia
Este momento en que recuerdo a mi eterna musa.