Hoy, 28 de enero
Como mi humilde homenaje.
Recordar nuestro Mesías.
Quiero este grandioso día
En que la Patria pariera
De sus almas... la Primera,
Que con grandiosa paciencia
Utilizó la elocuencia
Para fundir los deseos
De ser libre a un pueblo entero
Sin ofensas ni exclusión
Y que a puro corazón con
El alma convenciera
A los primeros guerreros
De aceptar los pinos nuevos
Como relevos valientes
Sin una mancha en la frente...
¡Unificando primero!
¿Cómo poder olvidar al patricio que forjó
Nuestra esencia, con honor,
Entrega, fidelidad, dedicación y bondad,
Ante la opresión ayer
Sin siquiera pretender
Al pasado desechar.
Que a todos les dio un lugar
Para al tirano vencer?
En El se fundió el decoro
La moral y la razón.
Testigos sus hijos son.
Testigos de su bravura
Su bien-pensar, su hermosura
De corazón al actuar.
Hombre de honor, fue seglar
Que nos infundió el amor
A la Patria y al Deber
Y que nos enseño a crecer
Ante las perversas mañas
Del enemigo visible,
También del que oculto yace
Y que servil nos produce
Repulsión por su conducta
¡Asco por su mala entraña!
¡Desprecio por lo que hace!
Con el corazón suscribo
Mi amor por el apóstol,
Que despreciando el temor
En Dos ríos se inmolara
Al Sol mirando la cara,
¡Fue enviado del Señor!