Un pez visita mis noctámbulos cielos
Como un cometa nada en ellos
Dejando al paso de su larga aleta su estela,
No hay estrella con brillo que le alcance
Para quitarme los ojos de su nebulosa blanca
Que entre metales y pasteles sus colores y candela
Hipnotizan mi mirada y soy sordo a la cautela
Insomne me mantiene pues en la oscuridad de mi cuarto
Y en la oscuridad de mi mente
Viene ligero, silencioso en suaves contorciones
A llenarme los ojos, a cual mosca espantar al dios Morfeo
Que posarse sobre mis parpados le atienen.