Nuestra constante aporía fue suficiente para despertar este silencio
Mi corazón te sigue esperando cauteloso y con aprecio
Vago por la triste trayectoria de tu olvido,
Donde domina el adiós doloroso que tu as decidido
Lanzando nuestro amor al vacío abismo del exilio
Cayendo en el orgullo el odio y su dominio
Es por eso que hoy, esta carta de escribo
Y ante la sequía de orgullo, te describo
Nuestro amor dijiste era impermeable contra todo defecto
Haciendo pasar los momentos a tu lado y cada día perfecto
Observo aquellas cartas con palabras que creí eran verdaderas
Hoy te escribo estas letras tal vez con faltas de ortografía, pero sinceras
Expresando que tus palabras han quedado vacías y callejeras
Donde mi dolor se hace presente con estas obsoletas ojeras
Parece como si mi corazón volviera a palpitar desde ultratumba
Pues desde tu adiós mi corazón, hace indemnizado en aquella tumba
Mi ser y mi corazón viven por inercia y solo vive como vegetal
Y sin ti el corazón carece de su facultad mental
Porque a tu lado todo era sublime y especial
Y te sigo esperando.