Miguel Vargas

*** AL DESAMOR ***

Blanco y vacío

torpe inclemente

con sincera burla me enfrento a ti

sin miedo a que arremetes.

 

Perro gordo y echado

dando lástima entre los rincones

bostezando el hambre oliendo

traseros milenarios.

 

Negro sin forma

sin dádivas

carente de toda sombra

los colores te aniquílan

y vuelves a perder.

 

Mañana no es mañana para ti

y francamente me importa nada

que perezcas, nada me importa.

Felicidad en cambote originarias.

 

 

Ayer te vislumbre en un cadalso

no avistabas tu soga al cuello

ni mi mirada hambrienta

al contrario,  reías con risa infantil

casi maternal, casi pura.

 

Sin embargo, al abrirse la compuerta 

sobrevino una angustia

de saber si solo con una prensada

morirías pues tu sonrisa

apretaba mis dientes.

 

Ahora como fantasma

sigues moviendo tus cadenas

en mi casa a pesar de ser yo

quien te colgó sin compasión alguna.

 

Imagen contraria

pelmazo hediondo

¿como saliste del amor?

 

¿Cómo se puede inventar la razón

y que de ella nazca la sinrazón?

¿Cómo del blanco al negro?

Un grito de auxilio para fallecer

para comprender, para nada:

para seguir creyendo que no existes.

Y si, estás…

siempre estás, siempre.