¡Háblame corazón! ¡Cruje en mi frente!
¡Toca mi alma! ¡Quiebra la desolación!
Garras y cuchillos
Maldad y depravación
Pululan el planeta sin el mínimo control
Balas que en zigzag perforan la ilusión
Cambiando vida y sueños por amarga situación
Armas que enarbolan
Bandera fratricida
Quiebran sin medida
La vida en su agonía
Almas arrastradas
Almas infelices
Almas desgraciadas
Almas maldecidas
¡Viento venenoso que les ha dado aliento!
Llévalas de regreso a su inmundo aposento
¡Átales al alma! ¡Quiébrales el cuerpo!
Pues no merecieron ni un instante muerto
Autora: Luz Marina Méndez Carrillo/