alicia perez hernandez

Tan tuyo, tan mío, y tan nuestro.

Tan tuyo, tan mío, y tan nuestro.

 

Un amor tan tuyo y tan mío,
pasado por los labios del deseo.
Un amor tantas veces descarado
que en arrullos sus quererse al desnudo.
Este amor tan tuyo, tan mío, y tan nuestro
eternizado en los latidos del ruido
mecido en el templo de los sueños
encendido en lirios perfumados,
como amantes enamorados.
Lunas callejeras que nos siguen,
sin pasos que se escuchen,
sin ojos que nos espíen.
Hay flores en la ventana de tu calle,
despiertas pasiones...
besos saciando su hambre.
Relojes sin manecillas,
no piensan, solo observan
como me desnudas desde los pies
cuando se encuentran los cuerpos
como se humedece la piel
como nos bebemos,
hasta embriagarnos.
Sorbemos el momento
y los labios se buscan,
como beso ávido.
En amores nocturnos
amor secreto…
hambre satisfecha
de amor. Mi amor…
Tan tuyo, tan mío, y tan nuestro.

 

Alicia Pérez Hernández… México
-No es la pluma la que escribe, es el alma-
Todos los derechos reservados©