Mis flamantes versos se posaron sobre tu piel,
Y fue inevitable recordar el ayer,
Cuando los nervios se sentían a flor de piel,
Tus labios tenían un dulce sabor a miel,
Desdé entonces me convertí en tu amante fiel,
Pero si no estas mi canción sabe a hiel,
Regresa, hagamos un presente mejor que el ayer...