Tengo una necesidad tan grande de gritar, de sacar tanto dolor de mi alma. Tengo mucha sed de llanto, ganas de sacar este nudo de mi garganta. Un dolor tan grande que no puedo cargarlo sobre mi pecho.
A un hija sin padre o madre se les llama huérfana.
A una esposa sin esposo se le dice viuda.
A una mujer sin hijo, no tiene nombre.
No hay nombre porque el dolor es incomparable. Es un dolor que no deberia existir. Pero aun mas grande es el dolor cuando ni siquiera puedes conorcer a ese angel tan pequeñito que llebe dentro de mi.
Fue algo tan fugaz, que no lo vi venir.
Tantas ilusiones que acabaron antes de empezar, tanto rezar, tanto pedir, tanta fe perdida junto con la muerte de mi bebe que hoy me siento vacia en mi vientre y en mi alma.
Me he entregado a la rutina, pero lo unico que me mantiene en pie es El. Las ganas de poder cumplir esos sueños que algun dia tubimos. Es El quien me mantiene con ganas de seguir. Pero como decirle que en las mañanas despierto con ganas de seguir durmiendo, de entregarme por completo a la depresion. Con una necesidad de ser parte de mi dolor y dejarme caer sobre el suelo sin poderme levantar.
Como decirle a nadie que me siento incapas de ser madre, que me siento sola y vacia. Que despues de esto es mi segunda perdida. Mi segundo dolor de esta magnitud. Me siento morir.
Como saber si mi vida tiene sentido, si tiene sentido seguir mi dia.
Quisiera estar tirada sobre mi cama sin pensar, sin sentir, sin doler.
Este dolor no me deja ser, siento que me estoy acabando por dentro. Que cada celula de mi sangre tanbien duele, tambien llora en silencio cuando solo quiere gritar que duele. Que extraña a este pedacito de cielo que se fue de mi. Quisiera que el tiempo pasara asi como paso cuando tube a mi bebito conmigo para no doler pero no, ahora va mas despacio que nunca, sintiendo cada segundo como si fuese una hora en pleno llanto.
Consuelo no necesito, tengo de sobra, lo que no tengo es paz, ni fe, ni vida dentro de mi vida.