Estoy amando demasiado
a la mujer equivocada.
Maldita la hora en que quise besarla.
Maldita la hora en que quise tocarla.
Para hoy,tener que sentir
este nudo...
que aprieta mi garganta.
Escucho su voz
susurrándo a la distancia.
Extraño sus besos,
sus caricias desbocadas.
Y la melodía errante
de su mirada centelleante.
La busco en las noches
y en madrugadas sin hogueras
Mis manos ansían tanto
volver a estrecharla.
Estoy amando demasiado
a la mujer equivocada.
Es mi alma arrastrada
quien me impulsa a evocarla.
Lo sé...
estoy amando demasiado...
a la mujer equivocada.
la sueño a mi lado.
en la noche desvelada.