ELLA NO SABE QUE ME GUSTA
No sabe que me gusta
y siempre está ahí.
Es más sublime que el aire
y más ligero que la brisa;
y tiene la mirada más dulce
y los ojitos más encantadores,
que cuando viene vestida de rojo
muestra todo su fulgor,
su elegancia y presencia
que armonizan la vida.
Y aunque no se lo he dicho
que es la mujer más preciosa del mundo;
ella desnuda mis letras
y sin palabras me deja,
y aunque existan adjetivos
ninguno está a su altura;
porque les falta albura
cordura y sabrosura
para calificar su hermosura
que tiernamente enamora
como la rosa al jilguero.
Su nombre de por sí ya es hermosa
y es más hermosa en persona
que hasta la mar se baña
y regocija con su presencia encantada.
Autor. LMML.