Araceli Vellber

Tiempo, para todo.

 

 

Crecí, pronto.

Con la intención de acortar,

La distancia de mis labios, a los tuyos,

De mi boca, a la tuya

Acercar mis ojos, a tus ojos negros.

Mi nariz, pegadita,

Nuestras mejillas juntas,

Como el aleteo de las mariposas,

Cuando sus alas se rozan.

Crecí, pronto, quizás demasiado rápido,

Algún eslabón de mi evolución,

Dejé en el armario, colgado.

Cuando los abro, huelo mi niñez, recién destetada

Y me acuerdo, que siempre hay un tiempo, para todo.