Te quiero tanto, bien mío, mujer
Que en luces fluorescentes me cubriste
Y las sombras en fulgor convertiste
Para que el amor pudiera crecer.
Te quiero tanto, bien mío, por ser
Planeta donde la bondad existe,
Mar que siempre con fiereza resiste
La tormenta que lo hace enfurecer.
Por ti vivo, bien mío, enaltecido
Del sumo amor que generosamente
Prodigas a mi vida cada día
Para que el recuerdo, en vez del olvido,
Perviva siempre, soberanamente,
Conmigo, contigo, con alegría.