***El evangelista San Juan,
reconocido como el poeta del Nuevo Testamento,
no sólo empieza su Evangelio con esta preciosa “imagen-arquetípica / imagen-fuente”:
\"En el principio era la Palabra, y la Palabra era Dios”,
sino que en su “Primera Carta” (capítulo 4-8)
en esos mismos Evangelios,
define esa “palabra originaria” (Dios) con esta otra imagen-fuente:
“DIOS ES AMOR” (“ò Zeòs agápe éstìn”) .
Amor como palabra-origen,
como fuente,
como imagen divina : “rostro de Dios”
***Inspirado en esas divinas palabras: “DIOS ES AMOR”,
hoy, “Día de los enamorados” (“en-amor-dados”),
se me antoja afirmar sin miedo a equivocarme que
“AMAR ES DIOS”, es decir,
uno de los rostros de Dios, que descubrimos física y afectivamente
dentro de nosotros mismos,
como amantes y como persona amada.
***La maravillosa escultura de Gian Lorenzo Bernini
(“El éxtasis de Santa Teresa”), que encabeza estas letras,
es una exquisita ilustración, un exquisito poema
de esa maravilla divina.
***En cada cultura (y cada una de ellas a su manera),
necesitamos celebrar el casamiento entre amante y amado/a
en torno a un rito preciso, fastuoso
y con una gran fiesta al amor y a la alegría.
Es más,
en mi país (España),
y probablemente en otros muchos países,
necesitamos volver a celebrar esa gran fiesta del Amor
25 y 50 años después, y por todo lo grande,
en las llamadas “Bodas de Plata” y “Bodas de Oro” respectivamente.
***A todos vosotros, amantes y amadas /os,
y, por supuesto, también a quienes “sufren de amor”
(bello y noble dolor),
os dedico este precioso “Rostro de Dios amante\",
que descubrimos en nuestro corazón
y en nuestra carne.