Noel Romero

Canto latinoamericano

Río grande, límite sinuoso

geográfico accidente entre culturas

a cuyo sur vasto y hermoso

hierve la sangre latina y pura

que da luz a un universo de colores

y se mezcla en los pechos de hombres nobles

que se enfrentan a la vida sin temores

por tener raíces fuertes como el roble.

 

Ese México de tierra esplendorosa

el de aztecas y pirámides legadas

con su Águila tan real y majestuosa

y una Dalia tan diversa y coloreada.

 

Guatemala volcán maya y de habla hispana

su Quetzal de hermosa cola resplandece

desde el pie la Monja blanca la engalana

desde arriba el Tacaná la enorgullece.

 

Viene regio El Salvador, Izote en flor

Torogoz de larga cola es emoción

aunque es de Centroamérica el menor

tiene grande como el Lempa el corazón.

 

Bella Orquídea que de Honduras es la proa

fiel amante Guara roja allá en el Pino

Pulhapanzak lleva el agua hasta el Yojoa

y alimenta a gente buena en el camino.

 

Nicaragua tierra firme de titanes

cola de Guardabarranco azul y negra

con su lago, su isla doble y sus volcanes

y la hermosa Sacuanjoche que te alegra.

 

Costa Rica, linda es tu Guaria Morada

tu Yigüirro es el heraldo de aguaceros

Los Crestones, cola blanca al viento alzada

simbolizan la grandeza de tu esmero.

 

Tu canal, ¡Oh Panamá!, puente del mundo

sobre ti Águila Harpía vigilante

con tu pueblo noble, sencillo y profundo

y con tu Espíritu Santo tan vibrante.

 

En Colombia es su fiel Lirio de Mayo,

entre todas sus orquídeas la más pura

donde el Cóndor surca el cielo sin desmayo

y es de sal Zipaquirá, magia y frescura.

 

De su Orquídea Venezuela está orgullosa

y amanece con el canto del Turpial

con su isla Margarita tan hermosa

y el soberbio Salto Angel sin igual.

 

Gran Brasil, eres gigante entre gigantes

con tu Loro, con tu Ipé tan amarelos

se alza un Cristo Corcovado vigilante

sobre el cálido Amazonas de tu cielo.

 

Es la rosa de Ecuador embajadora

monumento de hemisferios colindantes

cuando el Cóndor escudriña y avizora

Chuquiragua de los Andes desafiantes.

 

Machu Pichu del Perú que el cielo tocas

de los Incas la Cantuta es adorable

cual el Tuqui, su Gallito de las rocas

y geoglifos más allá de lo insondable.

 

Patujú que de Bolivia es la más bella

como el Cóndor majestuoso allá en su nube

desentierra en Torotoro fósil huella

y destaca el Titicaca cual querube.

 

Canta el Guyra en Paraguay como campana

junto al salto del Monday y de Cristal

mientras ese túnel verde magia emana

la sutil Mburucujá es angelical.

 

Ceibo en flor del Uruguay, esa eres tú

con el Tero, fiel guardián que da respiro

del ocaso sobre el río en Paysandú

o la calle colonial de los suspiros.

 

A la sombra del gran Cóndor Chile está

con Copihue el fiel amor que nunca vi

con los Andes a lo largo de tu espalda

y enigmáticos Moais en Rapa Nui

 

Argentina, beso atlántico en La Plata

canta a dúo allí el Hornero laborioso

donde el Ceibo abre sus flores escarlatas

pampas, gauchos y un Aconcagua glorioso.

 

En un salto hasta la América antillana

hay más tierras de latina sangre y raza

bellas islas cuyo encanto las hermana

y que el norte del Caribe las abraza.

 

Ritmo de Dominicana, gente entera

con su Rosa nacional de Bayahíbe

y su bella y especial Cigua Palmera

y el gran Faro de Colón que allí se exhibe.

 

Puerto Rico quien te ve siempre te halaga

tus castillos y tu isla de la Mona

tu sensual y atractiva flor de Maga

y tu dulce Reina Mora de la zona.

 

La mayor de todas, Cuba, es mi destino

como bella Mariposa, blanca flor

Varadero, el sol, el Morro y el Turquino

Tocororo de bandera en su color.

 

Es mi América Latina a quien me apego

un crisol de raza, historia y sentimientos

desde el Bravo hasta la austral Tierra del Fuego

del futuro sentaremos los cimientos.

Con orgullo, cada cual, de su nación

que despliegue allá en lo alto su bandera

y no importa donde viva o donde muera

su país lo llevará en el corazón.