Podría escribir poemas describiendo tu belleza o hacer esculturas para resaltar tu cuerpo y silueta, quizás te ofrezca las estrellas del cielo y te defienda en un mundo fantasioso de dragones y te proteja de bosques encantados, pero en este amanecer te regalaré un ramo de rosas para alegrar tu despertar y desear lo mejor para ti.
Las estrellas alborozadas iban desapareciendo lentamente mientras la luna con tristeza se escondía en el mar, pero su reflejo lleno de luz avivaban con más brillo las olas en la orilla del mar; una gaviota volando y arrullando hacía oír su cantar; los primeros rayos del sol anunciando que un nuevo día ha llegado; pintemos de colores cada día para que la felicidad nos acompañe siempre.
El esplendor del amanecer, el canto de los pajaritos en sus nidos, la brisa suave que hace bailar las hojas en sus árboles, los primeros rayos de sol que atraviesan por tu ventana, es el aviso que llegó el alba, un día que viene cargado de alegrías para ti y todos nosotros a disfrutar y reír; un beso, un abrazo, un buen apretón de manos.
Un nuevo amanecer, un nuevo día por el cual disfrutar, una nueva semana comienza y debemos dejar atrás ese fin de semana de descanso que quizás nos significó más desgaste o cansancio, un ramo de flores blancas reflejando la pureza de esta semana que comenzaremos a vivir, felicidades y no hay que olvidar que a cada día uno le da el color necesario para disfrutarlo, saludos a todos.
Buenos días