Ayer, ¿Qué te guardas y no te recuerdas?
Allí está, la verdad de lo que vives,
rompe el muro que te impide mirarlo,
nadie conoce el secreto guardado.
Prefieres la amargura de la tumba,
a lo dulce de la vida el día de hoy.
¿Cómo se hace para abrir la ventana,
para que entre la luz a lo escondido?
Levanta cortinas y el sol que brille,
la alcoba está cerrada, huele a humedad,
el pasado es un moho en descomposición,
que se mueva el aire, para ventilar.
Que entre y salga, por puerta y ventana,
pónle lubricante a los candados,
el corazón, la llave para abrirlos,
así descubrirás que son fantasmas.
Has tenido miedo a lo inexistente.
¡Ven, toma tu asiento en la claridad!
Cierra los ojos, silencia tu mente,
es un viaje a lo viejo que conoces.
Ve quitando los ladrillos de tu barda,
descubres el mundo que antes viviste,
todo lo que encuentras es como el oro,
columna que hoy sostiene tu morada.
Esa riqueza te lleva al momento,
a vivir y a sentir la realización,
no difícil, se vive cada día,
sólo nos ofrece cada instante.
EL POETA DEL AMOR. 09-02-15.
CASM.
CABO SAN LUCAS, BCS. MÉXICO.
Saludos, pensando en Las circacianas.