De pronto se oye un sonido
seguido por un crujir
el suelo se está moviendo
y el viento empieza a rugir.
Las aves alborotadas
de sus jaulas quieren salir
el perro gime de miedo
yo pienso me iré a morir.
La tierra abre sus brazos
y ruge con ronca voz
cristales ruedan al suelo
sus grietas nos dan pavor.
Las casas como los naipes
caen unas tras de las otras
la gente corre espantada
el corazón se desboca.
Corren unos a la iglesia
en sus ojos hay temor
a rogarle al creador
que ya pare este temblor.
Dios no escucha aquellos ruegos
y la iglesia se derrumba
dejándolos allí enterrados
la iglesia se convirtió en su tumba.
HELIGRARI 12/29/06