Un pedazo de cielo tú, me regalaste
con algunas estrellas y un rayo de la luna
para que me acompañaran, mientras tu llegaba.
Pero una noche, mientras te esperaba
algo extraño ante mis ojos sucedió
porque el pedazo de cielo que me diste oscureció
las estrellas me dejaron de alumbrar
y el rayo de la luna se ocultó.
Pero aún asi, yo te seguia esperando
sin ninguna señal de que llegaras
y ya el alba, empezaba a despuntar.
De pronto, apareció un lucero,
que su luz al pasar me iluminó
y en su estela que dejaba pude ver,
letras dibujadas que decian:
que ya no te esperara
porque en otros brazos
de mi amor, tu te olvidabas.
En ese instante, mi mundo
ante mis pies se derrumbó
sentí, ser de un terremoto su epicentro
que sacudía todas las fibras de mi ser
y en mi dolor, no podía entender,
¡ cómo pudiste ser tan cruel !
para sin niguna compasión,
de esa manera, romperme el corazón.