El tiempo me va guiando
hacia una estrella lejana,
la misma que esa noche
me brindó su resplandor,
presiento que el cielo amigo
la traerá a mi lado,
para poder preguntarle
si a mi amada...no la vio.
Tengo miedo que me diga
que la vio del brazo de otro,
me hice muchas ilusiones
con un encuentro feliz,
aunque soy muy positivo
el temor no me abandona,
los años se van pasando
ya no soy...el que antes fui.
Pero pienso seriamente
que si esto no se cumple,
trataré que su recuerdo
me sirva de inspiración,
para el resto de mi vida
en que andaré por lugares
contándole a quién me escuche
amar siempre...es lo mejor.
No me quejo, al contrario
pues tuve tiempos mejores,
los malos también se inscriben
en el libro del vivir,
los buenos yo los computo
como guerras bien ganadas
los otros como tropiezos
pero siempre...hay que seguir.
Boris Gold
(simplemente…un poeta)