Esos días cuando sueño contigo
entre susurros; con ecos de emoción,
que nos dejan la bella sensación
de que siempre quieres estar conmigo.
Un desvelo tengo entre mi corazón,
es un palpitar, fuente de ilusión.
Sin encontrarle ninguna explicación,
son ensueños... matices sin razón.
Las radiantes estrellas camufladas
en tu pecho, canticos anhelantes
de ese amor con esperanzas doradas.
Los días cuando me dices te quiero,
son aquellos anhelantes instantes
tan bellos, que yo por tu amor me muero.