Todavía te busco y te busco en vano,
pues que inutil es buscar si algo no existe,
o intentar coger el aire con la mano
o estar triste para que alguien no esté triste.
Y aunque pretenda encontrarte, te resistes
igual que dios se resiste a algún cristiano
que entre las nubes de dudas aun persiste,
con una aguja acertar en un pantano.
Te busco mujer inteligente y bella,
que ante mís ojos desnudas tu figura,
de lindura sin igual, que dejas huella,
pura de sentimientos y de alma pura.
Y yo en ese altar te veo y no te veo,
desconociendo si gusto o no te gusto,
dudando si te deseo o no deseo
y hacer o no un monumento de tu busto.
Mas si algún día quisieras acercarte
en ti soñando yo aun te estaré esperando
y esperando. Mientras, sigo enamorando
con los abrazos abiertos para amarte.