Escribo porque me siento
como viña a orilla del camino
lleno de hojas, uvas y sarmientos
donde el que pasa toma su racimo.
Sin preguntar ¿por qué?
solo tengo que entregar
lo que un día mío lo fué
para vuestros gustos escanciar.
Si alguién quiere golpear
ya tiene sus instrumentos
por si quiere aleccionar,
cuente con los sarmientos.
Si el calor le acrecienta
bajo las verdes hojas
con un poco de paciencia
tu cabeza no deshojas.
Si encuentras mucho trabajo
puede que encuentres perdido
sin uvas, ni jugo, en un escobajo
se dará cuenta lo fácil del sin sentido.
Ahora que solo toma
el que desee hacerlo
que sin punto y coma
bueno o malo hay que quererlo.
Ya que a uno le regalan
lo que esta recogiendo,
porque siendo un galán
no ando respondiendo.
La voz en su pronunciación
no tiene elementos
solo la inflexión
del parlador en sus momentos.
Así la parra no cuenta
con una popular grafía
solo la alimenta
la savia, que no es ortografía.