¡MIS DELICIAS ERES TÚ!
Oh, vientos del alma mía
lumbrera de mis lamentos,
amor mío de mi vida
no sabes lo que te quiero,
en el silencio nocturno
y sin verte yo te veo,
y te llamo el amor mío
en este sublime sueño,
que se agolpa en mi codaste
y me acorrala al tormento,
en estas noches tan tristes,
momento que yo no aliento,
por verte, oh, diosa mía
tendida sobre mi pecho.
Con tu boca en mi boca
escribiendo lindos besos,
desde tus cejas de luna
desde tus ojos de ensueño,
y en el huerto de tus viñas
veredas de tu suave cuello,
quisiera beber el vino
ese vino que es veneno,
elixir de mis delicias
varadero de mis sueños.