La luna llega en silencio y me da un beso
Casi es la media noche y las moscas no paran de volar en la oscuridad
El espejo ya guardo las imágenes mas esenciales
Las cosas ya duermen
Afuera se escuchan pasos telúricos
Las sombras tienen harapos y se revuelven con el eco de las palabras dichas en el día que ya falleció
Salen de mi boca los bostezos como si salieran de una tumba
Restos de luz en el cuarto suspiran y amenguan
Tal vez los fantasmas han llegado a la casa
Tal vez están desnudos como otras veces
Caminan desde la sala hasta los pensamientos
No tienen prisa de flotar por la casa
No tienen ganas de jugar con el perro
Por que en el fondo son tímidos los fantasmas
Mientras tanto yo estoy cansado del colchón
Me harta su algodón monótono
Detesto su paciencia y su silencio
Detesto el colchón cuando me abrasa con cierto amor
Lo detesto cuando quiero pensar y no dormir
Por ejemplo pensar flores y huesos
Pensar en el motor que es el amor
Pero hoy a quien le importa sentir mariposas entre las viseras
La frescura y humedad de un beso q quien le importa
Vamos humanos amemos al polvo
Amemos la mentada de madre del vecino
Amemos a ese inmenso ano que es la libertad
Cuantas cosas piensa uno cuando no puede dormir
Largos pensamientos brotan
Como si fueran tentacúlos que se aferrán a los muros del cuarto que lo tiene a uno prisionero
Manos con ojos y corazón
Con uñas que rasgan la oscuridad
Y aun no llega el sueño
Bendita almohada de piedra
Cuanta baba retiene
Un día de la almohada saldrán plantas y retoños
Veneros y rayos de luna
Pecados ácidos
Ruidos y gemidos acumulados