¿Casualidad o destino?
No lo sé,
¿Quién te puso en mi camino?
Debió ser Dios,
¿Quién más regalaría maravillas?
De las que poco existen hoy en día.
Es de humanos el temor
Y más cuando se trata del corazón
Comprende mi razón y no te alejes con rencor
Estorba el pensar quizá me vaya mal
Pero duele gritar, debí luchar,
Ámame, bésame, quiéreme
Tócame, deséame,
Que no me importa lo demás.
El tiempo nos dirá
Ya es tiempo de llegar a la meta final
Donde estará?
No me importará
Arriesgarme he decidido
Y el cielo es mi testigo
Amorcito
hoy te pido que perdones mi descuido…