Tienes nostalgia,
tengo elegía,
tienes pensamientos,
tengo poesía,
eres constancia,
soy sentimiento,
y te amo intensamente,
a cada momento.
Eres como eres,
yo así te quiero,
eres mes de enero,
yo un día entero,
eres tú mi sueño,
y mi sabiduría,
que recorre con esmero,
toda el alma mía.
Tienes no sé cuánto,
tengo un no sé dónde,
y a puro silencio,
tus besos se me esconden,
tienes humildad,
yo tengo certeza,
que eres ansiedad
y eres belleza.
Tienes más que eso,
y tienes mis sucesos,
tienes voz cautiva,
y besos de miel,
por eso me motivas,
por toda la piel,
tienes mi tiempo,
y alma color viento,
por eso es que te amo,
a cada momento.
Tú eres el día,
yo soy la noche,
y juntos andamos,
el camino sin reproche,
tienes luz de luna,
y yo tengo la fortuna,
de poderte gritar,
como tú ninguna.
Y eres resultado,
de mis teorías,
desde donde se afirmaba,
que eres cofradía,
con luz y motivo,
en cada sentido,
de este imaginante,
que sueña contigo.
Ricardo Felipe
Un soñador sin mucha estirpe