Coco tenía
cinco años,
cuando un
coche lo atropelló.
Se quedó inválido.
Es así que ,
su amo ,
se las ingenió,
para que Coco,
como su fiel
compañero,
pudiera volver
caminar...
Siempre
había sido,
muy habilidoso
con sus manos,
y le diseñó,
su propio
andador,
ajustado a las
dos patas
que le quedaron.
Todas las
mañanas
siguieron dando
su paseo
habitual y
es hermoso,
en la tarde,
ver como
Coco juega
con una pelota.