Las manos están frías
hay hielo en la cama;
tu ausencia hoy brilla,
lejos dejaste ser dama
Los besos, afiebrados:
las manos, calientes;
la lengua, bien afilada;
los pies son durmientes.
El mundo es una copa
llena del amor brindado.
Tu boca es el cáliz eterno
donde todo ha terminado.