Buscándote
Estaba la luna como farola encendida
iluminando mi camino,
cuando el manto oscuro de la noche
se adueñó del firmamento.
Con esa farola por guía
salí a buscarte a la playa;
cuestioné a las caracolas
sin entender su murmullo.
Pregunté al mar por tu nombre
mas el rugir de sus olas
su respuesta ensordecieron;
seguí buscándote, esperando…
Te esperé en el susurro del viento,
te busqué en la espuma blanca,
hasta creí verte en una estrella
y escribí tu nombre en la arena.
Cansada, me quedé dormida
y soñé, ¡soñé que tú estabas!
y que te había amado en la playa
a la luz de una farola.
maria_dg