Solo un hombre
Por las calles se escuchan tus pasos,
pareciera que el alma te pesa
se sienten cansados, lerdos, agotados;
anhelas llegar a casa y no encontrar sorpresas.
Las horas del día se vuelven eternas,
ansías ver la luna y el ocaso,
tu cuerpo ya sin fuerzas pide tregua
tu espíritu maltrecho pide un descanso.
Los duros años su huella han dejado
tatuajes en tu piel ajada;
rememoras recuerdos de un pasado
más de ellos no queda nada.
Has entregado la vida a tu familia,
les diste todo lo que has podido darles,
eres su guardián, eterno vigilia,
siempre tu prioridad ha sido amarles.
Más todos olvidan que eres solo un hombre
que abandonó sus sueños y fantasías,
para ver a sus hijos fuertes como un roble,
aunque de ilusiones su alma quede vacía.
Sigue andando ese duro camino,
padre, esposo, fiel amigo…