Deseo izarte sobre el mástil
de mis deseos para recorrer los mares
del tiempo como tiempo mismo,
para que cuando llegue el momento
de la no juventud sigamos
siendo los mismos que nos
hemos amado desde siempre,
desde la primera mirada,
desde el primer beso,
desde la primera caricia.
Deseo enmarcar tu imagen
en la memoria así, al natural,
sin aditivos telares que opaquen
tu belleza pues tu piel es el mejor
de los vestidos que me puedes enseñar.
Quiero la vendimia de tu cuerpo
para embriagarme de tu alegría,
para ir por el mundo de tu mano
y tu conmigo siendo el mundo mismo.
Sabes? todo tiene sentido
desde que sos parte de mi esencia,
te volviste mi aire,corazón y motor.