Nunca sabrás si es sobre la noche,
Que cae en tus ojos desigual-mente,
Si es sobre tus labios, que fulguran,
Amenazantes de reproche,
Nunca sabrás si es solamente, este mirar,
Un adiós en la mañana que dos
Corazones nunca olvidan.
Nunca sabrás si es muerto el color
Azul del mar, no sabrás si es mi voz
El atardecer de tu eterna infancia,
No podrás decir, al morir la flor,
Si es el horizonte más lejano y más triste
Que tu desolación.
Francisco De Tescia