Dominatorque

La línea dibujada de tu vientre

No nace el tiempo en tu boca

Que calme mi sed más profusa

No se extiende suficiente tu espalda

Para mis cálidas velas de letra y caricia

 

 

No hallo el río cansado que nace en tus labios

Y desciende callado hasta yacer intranquilo

En el remanso profundo de tu ombligo

 

 

Porque las abarcas de mis dedos pisan silentes

El terreno prohibido de las flores

Donde la reina del sonido degollado

Es un lirio desnudo y virgen

Que solo suspira, jadea y se sonroja impaciente

 

 

Pueda más el deseo, que mi verso olvidado

En entretenerte dormida de voluntades

Y poseer tu rima caliente

Desprendida de toda condena e imposibles

Porque ya crucé la línea dibujada de tu vientre

Y solo necesito

Que las lluvias rieguen mi fértil sueño

Preñen de fuego tus entrañas dulces.