Es mejor poco que nada,
un recuerdo al vacío,
un instante a la frustración
de no haberlo intentado.
Pero lo dejé pasar…
Tarde, es tarde para volver atrás.
Me miras frío y no puedo contestar.
Me reclamas, me acusas.
No me puedo disculpar,
los dos hemos sufrido inútilmente.
Nunca conocí la felicidad.
No importa haberte dejado,
siempre te he amado, imposible ha sido olvidarte.
No tuve que tocarte, ya eras mío, ya era tuya.
Te confundes, te mezclas,
me mareas, me exiges, me pospones…
Te entiendo.
No me odies por equivocarme,
no me desprecies por ser cobarde.
La vida es demasiado corta. Soy responsable.
No tengo alma, no tengo cuerpo,
se ha atragantado el tiempo
en una súplica inútil que regresa,
y regresa y regresa.
Escuchando “Sea” by George Winston