Felicidades padres, felicidades hijos si habéis sido afortunados de ser amados sin perjuicios.
Sin perjuicios de pensar diferente, de ser del sexo que seas, de ser más o menos inteligente, de ser más o menos bellos.
Felicidades padres si participáis de la crianza de vuestros hijos, si por el camino habéis olvidado el cruel machismo.
Felicidades padres, si habéis sabido daros a respetar ante vuestros hijos sin deja de ofrecerles vuestro cariño.
Felicidades padres, si respetáis a vuestros hijos sin perder el hilo de que sois además de padres educadores y no meros espectadores de cómo por falta de criterio otros han de padecer la mala educación de vuestros jóvenes o niños.
Felicidades padres, por ser buen ejemplo y no un impositor de criterios, por no caer en la tiranía de los niños, por no regalar caprichos ni pagar las obligaciones de vuestros hijos.
Felicidades padres, por saber valorar sus metas alcanzadas y acompañarles en sus alegrías y penas, en su aciertos y fracasos, en sus inquietudes y cansancios, a la hora de sus caídas, para ayudarlos a levantarse, sin caer en el error de hacerles sus trabajos.
En hora buena padres, por aceptar vuestros errores, por saber rectificar y dialogar con razones.
En hora buena padres, por saber decir no, por manteneros firmes cuando os apremien sin razón, por no dejar la educación de vuestros hijos a quienes no lo engendró ni parió.
Felicidades hijos, si tenéis un padre que sin violencia sepa con ternura educaros a ser buenos ciudadanos y haga de vosotros seres que ante las adversidades os sepáis reponer, que sepáis cuando decir sí o no, que seáis personas de noble corazón.
Este será el mejor de los tesoros para los dos.
FELICIDADES PADRES POR PONER EN LA CRIANZA DE VUESTROS HIJOS AMOR Y ATENCIÓN.
LUISA LESTÓN CELORIO