Miro tus ojos y recorro ese paisaje deslizando mis manos por tu silueta.
Un ardiente suspiro escapa desde mí y el ansia de sentir por debajo de tu piel.
Atrevido y sigiloso tomo la fuerza y en el flirteo se vuelve pasión,
Perdiéndonos la cordura, arrojándonos a la locura.