Olvidar
¿Es eso lo que han hecho tus hijos?
Oh tierra que un día se vistió de púrpura
cuando la sangre si llegó al río
y cuando un monstruo hambriento
sembró tus calles de dolor.
Perdonar,
Seguramente habrá que perdonar,
para que el odio no ahogue las semillas
que hacen salir el sol, el nuevo sol.
¡Perdonar sí, pero olvidar jamás!
Porque el hombre que olvida su pasado
está condenado a repetirlo,
porque su mejor maestro, es su último error.