Cuenta la leyenda que un joven sufrió un accidente ,
que nunca caminaría, pero nunca murió su fe,
sus ganas de luchar, sin importar el tiempo y los dolores que lo
acompañarían toda su vida,
pero no apostaban un futuro a su lado,
la vida lo seguía derrumbando con operaciones y limitaciones en su cuerpo,
pero sin importar el dolor y burlando a las posibles recaídas este seguía adelante,
sin amor pero con esas ganas de dar,
sin posibilidad, pero con ganas de crear,
sin mas opciones pero siempre buscando la quinta pata al gato...
eso era él un pendejo terco ,
siempre con una sonrisa y una solución en la boca,
y con las ganas de dar las respuestas así no la sean,
pero la gente buscaba indicios a estos errores de respuestas,
para llevarlas como enseñanzas a sus hogares,
siempre con ganas de ayudar y aconsejar,
aunque los seres humanos nos guste vivir nuestras propias historias...
solo somos seres humanos,
cada uno con una historia ajena a las demás,
con el miedo que nuestros errores nos dejaron,
pero la vida no se detiene, así que sigamos equivocándonos,
por que cuando aparezca la solución
solo reiremos de esta, SI SOLO UNA ANÉCDOTA EN NUESTRAS VIDAS .....