Mis ojos reciben imágenes cobre y aceituna,
Mi sudor se enreda con el agua del “día D”
Y el zumbido de la muerte aletea en mi cabeza.
Los hijos de Dios convalecen y flotan sobre el agua
A manera asesina de la ametralladora alemana,
Y la esperanza de mis ojos: el infinito acantilado.
Cerré mis ojos al encanto de un sueño y me arrulle,
Vi a Jesús en mi barcaza sobre el Canal de la Mancha,
Y las uñas de las olas desgarraron la barca de papel.
Mientras mi pierna duerme en la roja Playa de Omaha,
Los perros de rojo, blanco y verde abren sus fauces,
Y entre los Caballos de Frisia mi vida amparaba.
La noche me regala cuatro de sus estrellas,
¡Oh, Jesús! borda mi insignia con tus manos,
Y llévame a descansar del dolor que deja la guerra.