Aprisionado
Sedienta cae la noche…
¡Desbordante!
Cual corazón enamorado…
¡Amante!
Un frío manto enmarañado
se percibe sin reproche;
pareciera en su crepúsculo sentir
aquel momento añorado,
a su razón solo la deja fingir
porque es solo un apasionado.
Sedienta cae la noche
cual corazón enamorado,
él, a su dolor…
por fin lo ha calcinado
y en su alma no existe más boche;
solo versos desea compartir
versos que lo tienen aprisionado,
él, más no puede resistir
él, seguirá siendo un ilusionado…
Sedienta cae la noche…
¡Desbordante!
Cual corazón enamorado…
¡Amante!
(victolman)