alejandro guardiola

MURIÓ EL POETA

Estaba escribiendo el poeta

llevando la muerte en el alma

intentando conservar la calma

su mente de pena repleta

 

Era una tarde cualquiera

cuando marchaba su amada

atendiendo de Dios la llamada

y aquello su alma rompiera

 

La noche pasaba lentamente

el poeta seguía escribiendo

sabía que ya estaba condenado

lloraba silenciosamente

 

Rodó su pluma hasta el suelo

sin fuerzas para sostenerla

el no podía soportar perderla

de pena murió el poeta